Metamodelo del Lenguaje: Eliminaciones

Eliminaciones del Lenguaje

El proceso de eliminaciones, dentro del Metamodelo del Lenguaje, es un mecanismo por el cual, a través de determinados filtros, suprimimos parte de la información, verbalizando sólo otra parte de ésta.

Es necesario eliminar informaciones irrelevantes, no sería posible poner en palabras toda una experiencia de manera completa, pero a veces excluimos parte importante de la información. Estas exclusiones las hacemos a veces conscientemente, y la mayor parte de las veces, de manera inconsciente, empobreciendo nuestro modelo general del mundoy generando confusión en los demás. Y desde la PNL procuramos crear puentes, por esto es que es importante saber indagar específicamente ante ausencia específica de información.

La idea al revisar las violaciones al lenguaje es poder, por un lado, comunicarnos de manera más prolija y completa. Esto lo logramos de dos maneras: en primer lugar, siendo más efectivo en la comunicación que emitimos; en segundo lugar, agudizando la escucha para detectar qué es lo que está faltando en la información que el otro nos da. Porque cuando falta información, tendemos a completar con lo que hay dentro de nuestra cabeza, desde nuestro mapa, como decimos en PNL, y terminamos haciendo lecturas de mente. Y no necesariamente en la cabeza del otro es lo mismo. La estructura profunda es distinta.

Es especialmente importante desafiar o metamodelear(dícese del acto de desafiar con preguntas del metamodelo) al otro cuando hay una eliminación empobrecedora de su potencial. Es decir, cuando el otro se está limitando. También cuando con lo que está diciendo no me alcanza para comprender lo que me quiere decir y prefiero preguntar antes de adivinar.

Al eliminar, podemos dejar de decir varias cosas:.

1. Eliminamos información general: “La niña se sintió apenada”. Obtenemos la información faltante preguntando ¿Con respecto a qué? Es más, muchas veces conviene agregar las palabras “específicamente” o “exactamente” con el fin de buscar el significado preciso; por ejemplo: “¿Con respecto a qué, específicamente, se sintió apenada la niña?”.
2. No especificamos el sustantivo: “No sirven para nada”. Antes de seguir hablando y asumiendo de quién se trata, debemos concientizar que nos faltan los sujetos de esta historia: ¿Quiénes?.
3. No especificamos el verbo: “Juan me dejó”, y para evitar hacer lecturas de mente, inferir una historia o responder algo de lo que luego podríamos arrepentirnos, preguntamos ¿Cómo? ¿Dónde? ¿Cuándo? Y completamos la historia con la estructura profunda de quien habla.
4. Supresión comparativa: “Hice la peor presentación”. “Este es el mejor producto”. Al usar adjetivos comparativos “mejor”, “peor”, “mayor”, “menor”, “caro”, “barato”, “lejos”, “cerca”, etc., estamos haciendo una comparaciónsin contar cuál es el parámetro o la regla con la que estoy midiendo. Solemos eliminar el punto de comparación, la regla, el estándar en base al cual estoy comparando.
5. Desafiamos preguntando ¿Comparado con qué/quién? ¿Con respecto a qué? ¿Mejor o peor que quién?.

Es curioso que por un lado, decimos mucho más de lo que queremos decir, con los gestos, la voz o los actos fallidos. En PNL, nos enfocamos bastante en aprender a calibrar estos indicadores. Y por otro lado, decimos mucho menos de lo que queremos decir, ya que eliminamos muchísima información.

La buena noticia es que, desde la PNL, con este Metamodelo del Lenguaje, haciendo buenas preguntas obtenemos buenas respuestas.

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